Auster, núm. 28, septiembre 2023, e083. ISSN 2346-8890
Universidad Nacional de La Plata
Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación
Centro de Estudios Latinos

Artículos

Contentus vivere parvo. Tiempos de vida sencilla en la elegía I, 1 de Tibulo

Chiara Grimozzi

Instituto de Investigaciones en Humanidades y Ciencias Sociales (UNLP-CONICET), Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación, Universidad Nacional de La Plata, Argentina
Cita sugerida: Grimozzi, C. (2023). Contentus vivere parvo. Tiempos de vida sencilla en la elegía I, 1 de Tibulo. Auster, 28, e083. https://doi.org/10.24215/23468890e083

Resumen: Tibulo contrapone en la elegía I, 1 la vida de opulencia del soldado con la de pobreza del agricultor. Teniendo en cuenta los aportes de Fisher (1970), Gaisser (1983) y Galán (1998), proponemos a modo de hipótesis que la elegía I, 1 (vv. 1-10, 25-28, 41-52 y 75-78) de Tibulo se estructura a través del deseo de una vida sencilla en el campo en armonía con la naturaleza, y se construye a partir de la oposición con la vida del soldado, mediante la repetición de las palabras divitiae, aurus, adsiduus, securus, acervus, somnus, parvus, via y aqua.

Palabras clave: Elegía I, 1, Tibulo, Pobreza, Soldado, Naturaleza.

Contentus vivere parvo. Times of easy life in the Elegy I, 1 of Tibullus

Abstract: Tibullus contrasts in the Elegy I, 1 the life of soldier’s opulence with the life of farmer’s poverty. Bearing in mind what Fisher (1970), Gaisser (1983) and Galán (1998) had said, we propose that the Tibullus’s Elegy I, 1 (vv. 1-10, 25-28, 41-52 y 75-78) is structured through the wish of an easy country life in harmony with nature, and it is built based on the opposition with soldier’s life, with the repetition of words divitiae, aurus, adsiduus, securus, acervus, somnus, parvus, via and aqua.

Keywords: Elegy I, 1, Tibullus, Poverty, Soldier, Nature.

Introducción

La elegía I, 1 de Tibulo presenta la oposición entre la vida de opulencia y la vida de pobreza como una dicotomía constante.1 La opulencia se relaciona con la actividad del soldado; mientras que la pobreza refiere a la del agricultor.2 Grimal nos informa que Tibulo “había vivido siempre en el campo, junto a su madre y a su hermana, en las faldas de las colinas de Frascati, entre viñedos y bosques, rodeado de aldeanos” y que se unió a Valerio Mesala Corvino antes de los veinte años para iniciar su carrera en las armas (2000 [1998], p. 189).3 Cairns indica que para la época de Tibulo el servicio militar era una posibilidad real (1975, p. 81): ser soldado implicaba estar en constante viaje y riesgo de muerte. Sin embargo, también era una manera en la que los equites romanos podían con suerte convertirse en ricos (Lee, 1982 [1975], p. 107). Como filosofía de vida el poeta opta en esta elegía por la sencillez, la vida de pobreza, no solo por motivos espirituales, sino también porque esto le permite estar cerca de su amada, Delia.

En cuanto a la estructura de este poema, Fisher explica que los primeros seis versos:

provide nothing less than a summary of the entire piece: all that follows is an elaboration of the elements found in v. 1-6 : the opposition between two contrasting sets of values, the opposition of two ways of life and the two figures which ‘concretize’ these values and ways of life, and the opposition of wish and harsh reality. (1970, p. 767)

La idea de que ya en los primeros versos se patentiza la oposición entre dos modos de vida y que eso estructura todo el poema resulta de suma importancia para nuestro estudio. Gaisser, por su parte, señala que podría dividirse de acuerdo a los pares de oposiciones semánticas que aparecen: la primera parte sería militia vs rura (Tib., I, 1, 1-52) y la segunda parte sería militia vs amor (Tib., I, 1, 53-78) (1983, p. 59). Además, afirma que la unidad formal de la elegía está asegurada por la repetición juiciosa de palabras y frases de sección en sección, por la disposición de temas ABAC (militia-rura-militia-amor), y, lo que es aún más importante, por la estructura similar de las dos secciones en sí mismas (Gaisser, 1983, pp. 59-60).4 El hecho de que este crítico considere la repetición de palabras como lo que asegura la unidad de la elegía es esencial para nuestro posterior análisis. Además, Galán explica que Tibulo “afirma un modo de existencia contrapuesto a otro, y este modo de existencia hace posible su modo poético, al optar por la uita iners” (1998, p. 35).

En este sentido, el objetivo del presente trabajo consiste en analizar en la elegía I, 1 de Tibulo una selección de versos (1-10, 25-28, 41-52 y 75-78). Teniendo en cuenta los aportes de Fisher, Gaisser y Galán, proponemos a modo de hipótesis que la elegía I, 1 de Tibulo se estructura a través del deseo de una vida sencilla en el campo en armonía con la naturaleza y se construye a partir de la oposición con la vida del soldado, mediante la repetición de las palabras divitiae, aurus, adsiduus, securus, acervus, somnus, parvus, via y aqua.

Mea paupertas

El poema I, 1 de Tibulo produce un paisaje que podría pensarse como alejado de la realidad, sin embargo, no lo es. Lyne opina que “far from an ‘idyllic pastoral world’ he seems to want the sort of simplicity that a contemporary country holding reduced in circumstances could offer” (1980, p. 152). En consonancia con esta idea, según Boyd, el campo descrito aquí es realista (1984, p. 273). Esta crítica señala que, si bien lo que Tibulo imagina tiene que ver con G. 2.458-540 y 4.125-48 de Virgilio, no se trata de un mundo idealizado, sino que Tibulo reconoce el anacronismo de la edad de oro y claramente desestima eso por tal al ubicar su campo firmemente en el mundo real (1984, pp. 274-275).5 Así en los primeros versos de la elegía ya se dice lo siguiente sobre el paisaje y los distintos tipos de vida que se proponen:

Divitias alius fulvo sibi congerat auro
et teneat culti iugera multa soli;
quem labor adsiduus vicino terreat hoste,
Martia cui somnos classica pulsa fugent.
Me mea paupertas vita traducat inerti,
dum meus adsiduo luceat igne focus.
Ipse seram teneras maturo tempore vites
rusticus et facili grandia poma manu;
nec Spes destituat, sed frugum semper acervos
praebeat et pleno pinguia musta lacu. (Tib., I, 1, 1-10)6

Que otro acumule riquezas de oro amarillento para sí y que tenga muchas yugadas de
suelo cultivado; que a este atemorice el incesante sufrimiento cuando el enemigo está
próximo, a este le ahuyente los sueños el toque de las trompetas de Marte. Que mi
pobreza me lleve a través de una vida sencilla, siempre que mi hogar resplandezca con
incesante llama. Que yo mismo plante como campesino las vides tiernas en tiempo
favorable y los grandes árboles frutales con mano fácil; y que la Esperanza no [me]
abandone, sino que siempre ofrezca un montón de granos y abundantes vinos dulces en
un lagar repleto.

Putnam destaca de los primeros versos de la elegía que “what we find, instead of an appeal for, or acknowledgement of, support or inspiration, is a brisk request for differentiation between the speaker and someone else (alius)” (2005, p. 123).7 Por un lado, tenemos la vida de soldado: divitias alius fulvo sibi congerat auro / et teneat culti iugera multa soli; / quem labor adsiduus vicino terreat hoste, / Martia cui somnos classica pulsa fugent (Tib., I, 1, 1-4). En primer lugar, se nos informa del resultado de esa actividad, la ganancia acumulada, divitias fulvo auro (Tib., I, 1, 1) y la conquista, compra o expropiación de tierras, culti iugera multa soli (Tib., I, 1, 2). Esto, según Galán, “se presenta como un valor negativo a descartar, sea por explícito rechazo, sea por haberse encontrado un modo más noble y adecuado de existencia en las tareas del campo, aquellas que conforman la uita iners” (1998, p. 49). En segundo lugar, aparece el efecto psicológico que genera ese tipo de trabajo, labor adsiduus (Tib., I, 1, 3, “el incesante sufrimiento”),8 que instaura el temor a causa del enemigo próximo, vicino hoste (Tib., I, 1, 3, “cuando el enemigo está próximo”), en los momentos conscientes e inconscientes, somnos (Tib., I, 1, 4, “sueños”). Della Corte en su comentario opina que con vicino hoste (Tib., I, 1, 3) Tibulo se está refiriendo a la guerra civil (1980, p. 124).9

Por otro lado, se introduce la vida del campesino como la deseable por el poeta (Tib., I, 1, 5-10). En primer lugar, se indica que la pobreza, a diferencia del soldado, debe guiarlo, pero se añade una restricción, dum meus adsiduo liceat igne focus (Tib., I, 1, 6, “siempre que mi hogar resplandezca con incesante llama”). Como se puede ver, encontramos nuevamente el adjetivo adsiduus, a, um que aparecía en I, 1, 3 (labor adsiduus), pero para referirse aquí a una realidad completamente distinta, la llama del hogar, ignis. Como recuerda Putnam, “the focus and the family arae were the heart of a Roman home. Upon them the Lares received offerings” (1987 [1973], p. 51). Por lo tanto, el poeta deja en claro qué es lo que debería ser incesante y qué no, según su punto de vista: a diferencia del trabajo del soldado que implica el viaje por tierras lejanas, en la vida de pobreza no hay viajes, sino la permanencia en el hogar y el culto a los dioses. Además, el brillo del fuego se contrapone al del oro en los primeros versos. En segundo lugar, se enuncian las actividades de esa vida de sencillez como campesino, rusticus (Tib., I, 1, 8): cultivar vides y árboles frutales (Tib., I, 1, 7-8). Por último, en tercer lugar, se encuentra una divinidad o, mejor dicho, la divinización de un sentimiento abstracto, la esperanza, a quien se le pide abundancia de granos y vinos (Tib., I, 1, 9-10). Mientras que en la primera parte de estos versos se veía el rechazo a la riqueza material basada en el saqueo y la matanza, aquí lo que el poeta solicita es una riqueza que provenga de la naturaleza y que esté basada en la interrelación del hombre con ella.10 Frugum acervos (Tib., I, 1, 9, “montón de granos”), por lo tanto, contrasta con la opulencia del hombre rico (Putnam, 1987 [1973], p. 52). Según Gaisser, “by making use of this opposition [riqueza del soldado y pobreza del campesino] and emphasizing the natural association of paupertas with the rura and pietas Tibullus was able to achieve a contrast with militia that was positive and moral by conventional Roman standards” (1983, p. 67). Por lo tanto, Tibulo crea en este poema un nuevo modo de considerar la vida del soldado, oponiéndose a lo que era aceptado en su época.11

Vivere parvo

Luego de invocar una serie de divinidades propicias para el campo se vuelve al tema de la vida sencilla:

Iam modo iam possim contentus vivere parvo
nec semper longae deditus esse viae;
sed Canis aestivos ortus vitare sub umbra
arboris, ad rivos praetereuntis aquae. (Tib., I, 1, 25-28)

Ahora, solo ahora yo podría vivir contento con poco y no siempre estar entregado a un
largo viaje; sino evitar los nacimientos estivales del Can bajo la sombra de un árbol, junto
a los arroyos de agua que corre delante.

A diferencia de la vida en el ejército que se experimenta con sufrimiento (Tib., I, 1, 3, labor adsiduus) e implica un largo viaje (Tib., I, 1, 26, longae viae),12 según el poeta, la vida austera provoca felicidad, ya que se presenta como contentus (Tib., I, 1, 25, “contento”). Se enfatiza también la inminencia del deseo a través de la repetición del adverbio iam (Tib., I, 1, 25, “ahora”). Además, la idea de un largo viaje (Tib., I, 1, 26) se contrapone con la imagen del poeta recostado bajo la sombra de un árbol escuchando a lo lejos el agua del arroyo (Tib., I, 1, 27-28).13 Este último esbozo expresa la permanencia e inacción del poeta en el campo. Sin embargo, una vez dicho esto, pasa a describir otras actividades de la vida sencilla como triturar y arar la tierra (Tib., I, 1, 29-32), proteger lo poco que se tiene de ladrones o de lobos (Tib., I, 1, 33-34) y solicitar la ayuda de los dioses a través de actos sagrados (Tib., I, 1, 35-38).14 La austeridad y simpleza se reflejan en el uso de adjetivos como exiguus, pauper y purus: exiguo pecori (Tib., I, 1, 33, “ganado exiguo”), paupere mensa (Tib., I, 1, 37, “pobre mesa”) y puris fictilibus (Tib., I, 1, 38, “vasijas de barro puras”).

Después de estas referencias nos encontramos nuevamente con más información acerca del deseo de austeridad:

Non ego divitias patrum fructusque requiro, quos tulit antiquo condita messis avo.
Parva seges satis est; satis est, requiescere lecto
si licet et solito membra levare toro.
Quam iuvat immites ventos audire cubantem
et dominam tenero continuisse sinu,
aut, gelidas hibernus aquas cum fuderit Auster,
securum somnos imbre iuvante sequi!
Hoc mihi contingat! Sit dives iure, furorem
qui maris et tristes ferre potest pluvias.
O quantum est auri pereat potiusque smaragdi,
quam fleat ob nostras ulla puella vias. (Tib., I, 1, 41-52)

Yo no busco las riquezas y las recompensas de los antepasados, que deparó a mi antiguo
abuelo la cosecha almacenada. Una pequeña cosecha me es suficiente; suficiente es que yo
descanse en un lecho, si es lícito, y que yo alivie mis miembros en el lecho acostumbrado.
¡Cuánto agrada que yo escuche recostado los vientos crueles y que estreche a mi
señora en mi blando regazo o que yo, cuando el austro invernal haya derramado sus gélidas aguas,
continúe despreocupado los sueños, ayudando la lluvia! ¡Ojalá que esto me toque en suerte!
Que sea rico con razón quien puede soportar el furor del mar y las tristes lluvias. ¡Oh que
perezca cuanto hay de oro y de esmeralda antes que alguna muchacha llore a causa de
nuestros viajes!

Della Corte explica que, en las primeras dos palabras, non ego (Tib., I, 1, 41), se establece una contraposición entre el poeta y la sociedad romana (1980, p. 129). De nuevo, como al principio (Tib., I, 1, 1), aparece el sustantivo divitias (Tib., I, 1, 41, “riquezas”). Aquí se evidencia que, además de la riqueza que se consigue a través de campañas militares, se rechaza también la que es obtenida por herencia: non ego divitias patrum fructusque requiro, / quos tulit antiquo condita messis avo (Tib., I, 1, 41-42, “yo no busco las riquezas y las recompensas de los antepasados, que deparó a mi antiguo abuelo la cosecha almacenada”). Luego pasa a definir, en oposición, qué es lo necesario para tener una vida austera. Mediante el uso del adjetivo parvus, a, um menciona lo primero que necesita: parva seges satis est (Tib., I, 1, 43, “una pequeña cosecha me es suficiente”). Este adjetivo ya se había utilizado en Tib., I, 1, 25 (parvo) también para referirse a la vida austera. El verso 43 se contrapone visiblemente a las muchas yugadas de suelo que poseía un soldado en Tib., I, 1, 2. Pero además es prioritario para la sencillez descansar en un lecho, (Tib., I, 1, 43, requiescere lecto), aliviar allí los miembros, (Tib., I, 1, 44, membra levare), escuchar recostado los vientos crueles, (Tib., I, 1, 45, immites ventos audire cubantem), abrazar a la amada, (Tib., I, 1, 46, dominam continuisse) y dormir tranquilo escuchando la lluvia (Tib., I, 1, 48, securum somnos imbre iuvante sequi).15 El agua ya había aparecido en Tib., I, 1, 28 (praetereuntis aquae) en relación con un clima estival; por el contrario, aquí las aguas son gélidas, porque se trata de la lluvia que derrama el austro invernal (Tib., I, 1, 47). Putnam nos informa que el viento en Tibulo está asociado con la navegación y la violencia de la vida militar (Tib., I, 3, 38 y I, 7, 20), con la inestabilidad del amor (Tib., I, 4, 21), de las adquisiciones de la vida (Tib., I, 6, 54) y de la belleza personal (Tib., I, 9, 14) (1987 [1973], pp. 56-57). Por lo tanto, podemos pensar a partir de lo que dice este crítico, que el viento, que amenaza el hogar formado por el poeta y la amada, es también una metáfora para referirse a la vida militar. Por su parte, Bassi afirma que en esta escena “physical action and purposeful activity are, so to speak, put to rest (one ‘pursues’ only sleep), and the sounds of nature signal the absence of the sound of the human voice” (1994, p. 55).16 El tema del descanso ya había aparecido en los primeros versos del poema refiriéndose a quienes están en campaña y sufren alteraciones del sueño (Tib., I, 1, 4, Martia cui somnos classica pulsa fugent). Como se puede observar todas las acciones que se establecen en estos seis versos tienen que ver con la inercia del poeta cuando está cansado o cuando el clima no es propicio, contrario a lo que les sucede a quienes aceptan llevar una vida como soldados: sit dives iure, furorem / qui maris et tristes ferre potest pluvias (Tib., I, 1, 49-50, “que sea rico con razón quien puede soportar el furor del mar y las tristes lluvias”). Para ellos la naturaleza se muestra en su peor versión. Esta situación climática más relacionada con una época invernal se contrapone con la de los versos (Tib., I, 1, 25-28) en los que encontrábamos un clima estival.17 Asimismo, el uso del adjetivo tristis, e para referirse a la lluvia resulta subjetivo: si volvemos a la escena anterior, según el poeta, como campesino, la lluvia es lo que lo ayuda a dormir mejor, pero acá, como soldado, la lluvia es un fenómeno triste porque es parte de los peligros de la navegación. Este adjetivo también se contrapone a la escena precedente donde aparecía la palabra contentus (Tib., I, 1, 25) para hablar de la vida sencilla. Por último, se presenta en esta ocasión también el oro como elemento de opulencia (Tib., I, 1, 51, auri), que ya ocurría en el primer verso de la elegía (Tib., I, 1, 1, fulvo auro) y se le suma ahora la esmeralda (Tib., I, 1, 51, smaragdi), como nuevo signo de riqueza y exotismo. Además, se encuentra otra referencia a la vida en campaña, al utilizarse la palabra vias (Tib., I, 1, 52, “viajes”), que ya habíamos analizado en Tib., I, 1, 26 (longae viae).

Por último, el poema finaliza con cuatro versos que funcionan de epílogo de los temas tratados:

Hic ego dux milesque bonus; vos, signa tubaeque,
ite procul, cupidis vulnera ferte viris,
ferte et opes. Ego composito securus acervo
dites despiciam despiciamque famem. (Tib., I, 1, 75-78)

Aquí yo soy un buen jefe y un buen soldado; id lejos vosotros, estandartes y trompetas,
llevad heridas a los varones codiciosos, llevadles también riquezas. Yo, seguro con mi
montón reunido, a los ricos despreciaré y despreciaré el hambre.

Putnam resalta sobre los versos citados que la alardeada paupertas no implica miseria (2005, p. 126). Debido a esto, el poeta dice despiciam famem (Tib., I, 1, 78, “despreciaré el hambre”), dándose a entender que la pobreza en este contexto ofrece una filosofía de vida en la que no faltan los alimentos ni el hogar, sino la riqueza exagerada de los milites. Como se puede ver, la palabra securus (Tib., I, 1, 77, “seguro”) ya se encontraba en Tib., I, 1, 48 (securum) para referirse al poeta que continúa despreocupado su sueño y la palabra acervus (Tib., I, 1, 77, composito acervo) estaba en Tib., I, 1, 9 (frugum acervos) para aludir a la abundancia de cosecha que le pide a la esperanza. Asimismo, composito acervo (Tib., I, 1, 77) remite a parvo (Tib., I, 1, 25) y parva seges (Tib., I, 1, 43), y tubae (Tib., I, 1, 75) a Martia classica pulsa (Tib., I, 1, 4).

De este modo, se solicita en estos versos que todo aquello que forma parte de la vida del soldado se aleje de él, ya que el poeta solo puede y quiere convertirse en soldado en las únicas guerras que le importan, las guerras de Venus.

Conclusión

La elegía I, 1 de Tibulo desarrolla el deseo de una vida sencilla a través de varios puntos: la oposición con la vida del soldado, la descripción de esa vida austera y la repetición de vocablos (divitiae, aurus, adsiduus, securus, acervus, somnus, parvus, via y aqua). Hay en este poema un principio armónico que se evidencia en la relación entre el hombre del campo y la naturaleza. Los extremos del clima, el verano y el invierno, no afectan su vida, sino que lo benefician, ya sea que el calor permite valorar la sombra, ya sea que la lluvia y el invierno ofrecen la motivación para un sueño placentero y reparador junto a la amada. Vivir contento con poco significa establecer un contacto con la naturaleza de manera pacífica y positiva a través de la agricultura. Significa también estar cerca de la amada y no padecer largos viajes buscando riquezas ajenas, porque el amor es parte del anhelo de una vida de simpleza.

Referencias bibliográficas

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Notas

1 Este trabajo fue producto de un Seminario de Posgrado sobre elegía erótica, dictado por el Dr. Pablo Martínez Astorino en la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación, Universidad Nacional de La Plata. Una versión preliminar fue leída como ponencia en el IX Coloquio Internacional: “Pensar la Antigüedad en clave contemporánea: Enfoques interdisciplinarios y nuevos paradigmas”, realizado durante los días 21, 22 y 23 de junio de 2023 en la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación, Universidad Nacional de La Plata.
2 En cuanto a la inspiración retórica, Cairns (1975) analiza tanto en esta elegía como en el epodo 2 de Horacio la influencia de los progymnasmata griegos sobre la alabanza al campo.
3 Este capítulo, “El amor y los poetas”, contiene un buen panorama de lo que era el amor en esa época y de lo que era el amor para los elegíacos, basado en sus poemas.
4 Este crítico está continuando en su estructura, entre otros, a Fisher: “formally, the elegy falls into two parts, v. 1-52, that is, exactly two thirds of the whole, in which the figures used to symbolize the basic contrast are the miles and rusticus, and the final third, v. 53-78, in which the rusticus gives way to the amator” (1970, p. 767).
5 Del mismo modo, el concepto de labor que en Geórgicas escenificaba la agricultura y tenía connotaciones positivas debido a su asociación con la edad de oro y su retorno durante el principado, aparece ya en el tercer verso de la elegía para referirse, por el contrario, al soldado. Acerca de la relación entre esta elegía de Tibulo y la Égloga I y Geórgicas de Virgilio, vid. el excelente trabajo de Putnam (2005). Para este crítico, Tibulo no reproduce, sino que adapta varios tópicos virgilianos en esta elegía.
6 Para la elegía I, 1 y la I, 3 de Tibulo seguimos la edición de Della Corte (1980). Las traducciones latín-español nos pertenecen.
7 Este estudioso considera que alius se refiere no solo a Mesala, sino también al hablante, que comparte las ambiciones de su patrón: “the poem begins, and continues, as an extended prayer for separation from ‘another’ who happens also to be both ‘self’ and sustainer of self” (Putnam, 2005, p. 125).
8 Según Putnam, adsiduus es elegido aquí por sus matices cuasi militares. Cf. Putnam, 1987 [1973], p. 50. Lee, por su parte, indica que labor “combines the ideas of duty, hard work and hardship” (1982 [1975], p. 107) y con respecto a adsiduus explica, citando a Cairns (cf. Cairns, 1979, p. 17), que “in the archaic Latin of the Twelve Tables assiduus was equivalent to locuples ‘rich’” (Lee, 1982 [1975], p. 107).
9 Así explica que “le guerre esterne sono lontane e non preoccupano i ricchi, che invece sono esposti, nelle guerre civili, alle proscrizioni, all’esilio, alla norte in casi di sconfitta del loro partito o clase sociale” (Della Corte, 1980, p. 124).
10 Fisher considera que paupertas (Tib., I, 1, 5), focus (Tib., I, 1, 6), antiquus (Tib., I, 1, 39 y 42) y fictilia (Tib., I, 1, 39) hacen que el lector recuerde la mítica y antigua República poblada por un pueblo piadoso y fuerte todavía no corrompido por la luxuria y auaritia (1970, p. 769).
11 Lee trabaja con la idea de que muchas de las palabras utilizadas por Tibulo para referirse a la vida sencilla en el campo corresponden, por el contrario, al ambiente militar. Cf. Lee, 1974, pp. 94-144.
12 Respecto de la frase longae viae, Putnam considera que es un eufemismo común en Tibulo para referirse al viaje, en especial con propósitos militares o comerciales y que la palabra via lleva consigo nociones de separación, inseguridad, deseo, etc. comunes en toda la poesía y constantes en las elegías (1987 [1973], p. 54). Cabe recordar que en la elegía I, 3 Tibulo incorpora este sintagma al hablar de la edad de oro: quam bene Saturno vivebant rege, priusquam / tellus in longas est patefacta vias! (Tib., I, 3, “¡cuán dichosamente vivían cuando Saturno era rey, antes que la tierra hubiera sido hendida a largos viajes!”). Tradicionalmente en el mito de las edades el comienzo de la navegación, de la división o apropiación de tierras, de la codicia y de la guerra eran vistos como elementos de corrupción, que provocaban la caída del hombre de la edad de oro a la peor de todas, la edad de hierro. Como se puede observar, estas actividades eran las que se llevaban a cabo en las campañas militares y eran parte de la vida de un soldado.
13 Además, según Putnam, “the tension between motion and rest, search and restraint, has its spiritual counterpart in the earlier motif of satisfaction versus greed” (1987 [1973], p. 54).
14 Nec tamen interdum pudeat tenuisse bidentem / aut stimulo tardos increpuisse boves; / non agnamve sinu pigeat fetumve capellae / desertum oblita matre referre domum. / At vos exiguo pecori, furesque lupique, / parcite: de magno es praeda petenda grege. / Hic ego pastoremque meum lustrare quotannis / et placidam soleo spargere lacte Palem / Adsistis, divi, neu vos e paupere mensa / dona nec e puris spernite fictilibus (Tib., I, 1, 29-38, “y, sin embargo, no me avergonzaría a veces sostener la azada o picar a los bueyes perezosos con un aguijón. No daría pena hacer retornar a la corderita en mi pecho a la casa o bien a la cría de la cabra abandonada habiéndola olvidado la madre. Pero vosotros, no solo ladrones, sino también lobos, privaos de mi ganado exiguo: el botín debe ser requerido de un gran rebaño. Aquí yo suelo no solo purificar a mi propio pastor todos los años, sino también bañar con leche a la plácida Pales. Asistidme, oh dioses, y no despreciéis las ofrendas procedentes de una pobre mesa ni de vasijas de barro puras”).
15 Putnam también considera al agua del verso 47 como elemento de inestabilidad. Cf. Putnam, 1987 [1973], p. 57.
16 Aunque es cierto que en estos versos no hay ninguna idea que remita a la presencia de la voz humana, no creemos que en esta escena se encuentre el tópico de la muerte como piensa Bassi en su artículo.
17 Al respecto, Putnam comenta: “though there are similarities between lines 27-28 and 45-48, we have moved from hot to cold, dry to wet, summer to winter, as the menace changes” (1987 [1973], p. 57).

Recepción: 22 Julio 2023

Aprobación: 21 Agosto 2023

Publicación: 01 Septiembre 2023

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